domingo, 28 de noviembre de 2010

miércoles, 24 de noviembre de 2010

martes, 23 de noviembre de 2010

Y un día volvimos...



Hacía tanto que no posteaba en este blog que casi me había olvidado lo que sentía cuando lo escribía. A veces las relaciones nos consumen otras nos ocupan gran parte de la vida y a veces demasiado poco. El tiempo hace que las cosas se pongan en su lugar y que el amor, como tantas otras cosas,  encuentre su espacio. Cuando esto pasa lo primero que nos pasa es sentir miedo; Cómo puede ser que ahora me sienta llena con cosas que hace un tiempo no me alcanzaba ni para una noche? Tuve miedo de que el amor ya no fuera amor, pero me equivoqué; el amor como todo crece y muta. Mi amor cambio, yo también cambié y encontré que todavía había espacio para mi, que había encontrado un lugar en el cielo pero que podía perderlo como todas aquellas cosas que uno amarra y que a veces se van sin decir ni chau. Sigo teniendo un corazón que madruga donde quieras, pero que también elige cuando quiere madrugar y cuando simplemente quiere quedarse acostado pensando en todo lo que pasó.